Hay que salvarlos

jueves, 12 de noviembre de 2009
A lo largo de los años hemos destruido el medio que nos rodea y lo hemos modificado de tal forma para satisfacer nuestras necesidades, pero cuanto tiempo más va a soportar el medio ambiente?.
Un ejemplo notable es que para poder construir viviendas con el fin de vivir de una forma más cómoda; la producción de hojas de papel para todo tipo de usos, por ejemplo: para escribir, el higiénico, para la nariz, etc.; la leña y los troncos de los árboles para poder crear fuego y otras acciones más, llegamos a la conclusión de que ha crecido el porcentaje de la tala de árboles.
Todos saben que los árboles brindan O2 entre otros componentes al aire y luego el hombre respira este oxígeno para poder seguir sobreviviendo.
Pero no saben que hubo algunos estudios que indican que muchas plantas pueden registrar la presencia de humo. Y se sospecha que, en ciertos casos, los componentes químicos del humo dispararían el proceso de germinación en las semillas enterradas. Esto permitiría, por ejemplo, regenerar un bosque cuando hay un incendio: el humo “despertaría” a las semillas que lo perciben. En un experimento se descubrió que las semillas de apio y lechuga pueden germinar en la oscuridad, cuando reciben agua saturada con componentes de humo. Por otra parte, algunas especies vegetales reaccionan a la agresión del viento, que puede herir su follaje. Se ha descubierto que, por ejemplo, las plantas de maíz refuerzan sus partes mas expuestas a los embates del viento.
Hace unos años, científicos de la Universidad Wake Forest, Estados Unidos, realizaron un experimento que sugirió que las plantas reaccionarían ante determinados sonidos. Cuando un aparato emitió un sonido a una frecuencia de 2 kilohertz (similar a la voz humana) y a 80 decibeles (un poco más fuerte que una conversación normal), los científicos observaron que una planta de arvejas crecía al doble de su ritmo normal, es decir, en silencio. Algo perecido ocurrió con el proceso de germinación de unas semillas de rábanos. Aparentemente, algunos sonidos disparan la elaboración de una sustancia que participa activamente en el proceso de germinación y el crecimiento vegetal.
Acá podemos notar que las plantas han soportado muchas de las modificaciones del medio ambiente y pudieron y pueden soportar incendios; los embates del viento; el sonido del ser humano. Pero todo tiene un límite porque cuando talan los árboles (incluidos todas especies de plantas) arrancan desde la raíz, y desde entonces no pueden crecer semillas enterradas y si quedaría alguna los embates del viento las dispersarían por todas partes y así no pueden crecer. Entonces hay que tomar conciencia de que sin las plantas nosotros no podríamos vivir, y aunque haya campañas, reservas ecológicas y parques nacionales no dan abasto.

Por: JuanMa

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